Fuimos una generación transgresora y valiente. ¡Sí! Éramos rebeldes, ¿Y qué?
La rebelión adolescente se preparaba para un concierto de voces y pelos largos reclamando Libertad, Igualdad, una sociedad más justa y menos hipócrita.
El sadismo y la perversión fueron moneda corriente. No teníamos alma para entenderlos.
no teníamos estómago para digerirlo.
Era un delito ser joven.
La gran mayoría de las víctimas de aquellos sangrientos cazadores éramos pibes y muchachas de entre dieciséis y treinta años. ¿Qué atrocidad habíamos cometido? Unos, creer que podíamos cambiar las relaciones de fuerza del poder.; otros, tener participación activa en centros de estudiantes o sindicatos para combatir el terrorismo de Estado; y algunos, solo formar parte de la libreta telefónica de alguien considerado subversivo.
A nosotros no se nos hubiera ocurrido ni en una película de ciencia ficción lo que pasó.
Nosotros creíamos en la libertad y en la superación del hombre por el hombre.
¡Cuántos ideales teníamos! ¡cuánta voluntad por creer que la humanidad era posible ser vivida con igualdad y dignidad! ¡cuánta sangre derrochada en combustión de agua!
Fuímos jóvenes íntegros, ¿Demasiado crédulos?, ¿Extremadamente idealistas?, tal vez; pero con ilusiones solidarias empapadas de aquella extraña mezcla de tabaco, fusiles, estrellas, panfletos, estudios, trabajos, militancia, folklore, rock and roll, amor libre y responsabilidad cívica... ¿Fuimos jóvenes?
Construimos puentes que más que unir, separaron. Distanciaron los anhelos de lo posible. Fabricamos castillitos de papel que las bestias quemaron junto con los libros de Cortázar y Benedetti.
Edificamos ilusiones que no cabían en esta tierra del terror y la corrupción.
Elevamos amenazas, amenazamos con revoluciones, revolucionamos el deseo, ¿Deseamos lo imposible?
A LOS PIBES COMO VOS TAMBIÉN LES TOCA SOBREPONERSE A ESTE PLAN DEL OLVIDO, A ESTE PREMEDITADO MUNDO DE MERCADEO, A ESTE NAUFRAGIO DE UTOPÍAS.
Hay miles de razones para morir en los celestes, y ellos al pintar los suyos intentaron diseñar un cielo.
Por eso se los llevaron, PORQUE IBAN A CAMBIAR EL MUNDO.
ESA ES NUESTRA HERENCIA... NUESTRO MOTIVO DE LUCHA.
LOS SAPOS DE LA MEMORIA - GRACIELA BIALET
Hoy, más que nunca, o más que siempre, pero todos los días con más fervor y convicción: te sigo buscando, sigo peleando por vos, que trataste con tus tizas de dibujar un mundo mejor, que tu corazón sobrevoló alto las cabezas gorilas represivas y asesinas. Que siempre estas! que no vas a DESAPARECER mientras alguien te siga pensando y luche para que tu muerte no quede impune! para que por fin podamos romper estas cadenas transparentes que nos atan y nos duelen pero que aún no podemos ver bien.
PARA VOS PEQUEÑO SER DENTRO DE MÍ Y FUERA DE ESTE CUERPO QUE SE MATERIALIZA Y ES LIBRE! POR TU LUCHA! PARA QUE NUNCA MAS CAIGAN LAPICES CON TU NOMBRE! TIZAS Y JULIOS! ROMINAS, MARITAS!